En el marco de las actividades por el 149° aniversario de nuestra hermosa tierra Abancay, el pasado fin de semana, una delegación de autoridades locales y congresistas y equipo técnico de Mincetur, emprendieron una visita de reconocimiento a la majestuosa ciudadela de Choquequirao, con un enfoque particular en la evaluación del proyecto de construcción del Teleférico y su influencia en los distritos circundantes de Huanipaca y San Pedro de Cachora. Este acontecimiento destaca el compromiso de las autoridades con el desarrollo regional y el turismo sostenible.
El congresista Hamlet Echeverría Rodríguez, presidente de la Comisión de Comercio Exterior y Turismo, y la congresista Elizabeth Taipe Coronado, representando a Apurímac, encabezaron esta comitiva, respaldados por la presencia de autoridades de la Municipalidad Provincial de Abancay (MPA): los regidores Marcelino Montes Aguilar y Gloria Sierra Mendoza, quienes ejercieron su papel como representantes de la comuna local en esta visita estratégica. El propósito fundamental de esta visita fue evaluar el impacto del proyecto del teleférico Choquequirao y su repercusión directa en la invaluable ciudadela histórica que forma parte esencial del circuito turístico de la región.
A lo largo de esta visita, se estableció un diálogo activo con pobladores de las comunidades de Marampata y Kiuñalla, cercanas a este gran proyecto, permitiendo la expresión de sus perspectivas y preocupaciones, así como su interés en la instauración de una mesa técnica de participación, con la finalidad de asegurar su involucramiento activo en el proceso y garantizar que se consideren sus inquietudes en cuanto al impacto potencial del proyecto en su entorno.
Se espera que el denominado originalmente “Mejoramiento de los Servicios Turísticos Públicos del Parque Arqueológico Choquequirao” genere un gran impulso económico para ambas regiones Cusco y Apurimac, incluyendo la creación de empleos significativos que respaldarán la reactivación económica. Más aún, al elevar la visibilidad de Choquequirao como un destino turístico de renombre, se anticipa que se convertirá en un tesoro cultural y patrimonial que desviará el creciente desbordamiento del flujo turístico de Machu Picchu, esperando a futuro más 1,2 millones de turistas de todas partes del mundo.